jota
2012 Chile
Durante el aborto, a pesar de estar asustada por el proceso y algo desolada, estaba segura de lo que estaba haciendo. Mis sentimientos cambiaron luego de cumplir el proceso, pues los días de sangrado los viví sola, sin mi ex pareja, quien se fue tras una discusión y comenzó al poco tiempo otra relación, lo que gatilló en mi un profundo pesar y rabia, ya que debí vivir sola una responsabilidad que nos correspondía a los dos. Pasé un tiempo pensando en como hubiera sido mi hijo , si lo hubiera tenido, con algo de ensoñación de por medio, pero pese a eso, jamás me arrepentí de haber abortado. Hoy en día me siento segura de mi decisión, pues no era el momento ni la persona correcta, además lo hice dentro de las fechas aceptadas científicamente, donde aun corresponde a solo una célula en formación, lo que finalmente me hizo sentir resuelta y ni hoy ni antes he sentido ningún trauma ni culpa, como tantos piensan .
Fue un proceso de susto y urgencia, pues el conseguir las pastillas por contactos que se dieron de tanto buscar por internet y muy caros, fue un estrés adicional a mi situación y una carrera contra el tiempo. Luego de tomarla, fue una experiencia algo dolorosa, como el dolor que provoca la menstruación pero diez veces más fuerte, luego sangré durante casi dos semanas sin dolor alguno.
Tuve hasta esa época, una relación muy inestable y masoquista con mi pareja de la adolescencia, prácticamente ya no estábamos juntos , él ya tenía un hijo, y yo me sentí incapaz de enfrentar la situación por ser joven, no querer tener hijos aún y por no tener una relación estable con mi ex pareja que pudiera brindar sustento a un niño por nacer. Además siempre he creído en el aborto como un derecho, si se toman medidas responsables y correspondientes . Arriesgándome a sonar extremista , no estaba dispuesta a darle un hijo a mi país, el cual te obliga a tenerlo sagradamente pero nadie te ayuda a sustentarlo en los términos prácticos que implica vivir, luego solo se te llena de discriminaciones y menoscabo primero siendo mujer, segundo siendo joven y para coronar: embarazada. No estaba dispuesta a darle " a la patria" un hijo solo porque "Dios así lo dijo", no estaba dispuesta a darle un niño/a un futuro inseguro, donde su única certeza al crecer es que nació de una relación frustrada, tormentosa, terriblemente enfermiza, donde el amor había muerto hace mucho tiempo en nosotros, donde solo quedaba una dependencia y nostalgia del pasado, carentes de emociones sanas y llenos de inmadurez para afrontar juntos la única triste situación que nos unía. Ese ser no merecía padres así, no merecíamos torturarnos recíprocamente. Yo no tenía nada fructífero ni sano que ofrecerle a un recién nacido en ese momento, y quién hubiera sido su padre, no dudó ni por un segundo del destino que tomaría la situación, lo cual fue aun más brutal en mi decisión y por consiguiente no dudé, estaba entre la espada y la pared.. mucho después vine a cuestionarme la falta de tacto de mi ex pareja, pese a que no me presionó jamás me preguntó directamente mi pensar, pero pese a esa molestia, yo por mi misma me sentía tan decidida como humanamente se podía estar en ese momento. No es que yo no respete la vida, la respeto en todas sus dimensiones cuando esta es digna de vivirse, cuando se vive para ser feliz, no para condenarse.
A ilegalidade de seu aborto afetou seus sentimentos?
Me afectó bastante, ya que al vivir en un país que no permite el aborto, me sentí en peligro y vulnerable emocionalmente, en algún momento exploté en rabia por esta nación machista, que aboga por dios y por una célula en formación antes que la salud física y mental de la mujer. En Chile la iglesia y la política están unidas hasta las entrañas, lo que hace que toda reforma política-social que atente contra SU formación y SU manera de ver la vida, sea una propuesta en un callejón sin salida. Al reflexionar sobre ello, la ilegalidad me provocó una ansiedad gigante, no tenia salida si es que llegaba a tener alguna complicación, ya que los médicos en su mayoría te condenan inmediatamente.
Como as outras pessoas reagiram ao seu aborto?
Se lo conté a pocas personas, en su mayoría amigos cercanos, quienes entendieron la situación que viví. Casi ningún integrante de mi familia lo supo, solo mi hermana, quien conocía esta página, desde aquí recibí apoyo, en cuanto a información y no perder el control emocional de la situación. Esta página fue un elemento importante para empoderarme de la situación que estaba viviendo y no sentir que estaba destinada a ser madre, como en Chile suele creer la gente.