Luka
Podziel się swoimi doświadczeniami
Hice lo mejor que pude, estando bajo toda la presión del mundo.
2013 Argentyna
Todas las ideas en sus comienzos son perseguidas y juzgadas ... pero luego con el tiempo se entienden que son las mas acertadas... Paciencia y tiempo es todo lo que necesitamos.
Fué todo un frenesí... sin descanso ni pausa para tomar aliento. Me encontraba saliendo con un hombre que había conocido hacía pocos meses, en ese entonces me hallaba profundamente enamorada de él y tal fué que nos fuimos a vivir juntos. Al poco tiempo quedé embarazada y el shock fue tan tremendo que me asusté profundamente, me veía muy jóven para ser madre, inestable economicamente, sin las habilidades para ser mamá me vi en la penosa situación de buscar la manera de interrumpir el embarazo. Los dolores de vientre eran fuertes, me dolía todo el día como si me fuera a bajar la mestruación, era estresante y agotador. Tras varias pruebas de embarazo confirmé el positivo y con el mis angustias, ¿Cómo iba a sacar adelante a un pequeño bebé si yo me sentía aún pequeña e incapaz?... Comencé a buscar por todos lados en internet como efectuar un aborto, encontré miles de chicas que decían haberlo logrado con pastillas. Así que sin perder tiempo busque vendedores de las mismas. Contacté con varios, todos me dieron miedo, me resultaron raros y sospechosos pero no podía darme el lujo de elegir, y contacté con una mujer que las vendía. Hicimos una cita en pleno invierno, la esperé durante horas, asustada, congelada, sintiendo que podrían secuestrarme o capturarme y llevarme a la carcel... El embarazo en ningún momento me hizo sentir bien, o cálida o en armonía, al contrario, todo el tiempo se hizo presente el dolor, la angustia y la incomodidad, mi cuerpo se sentia muy mal, lo que empeoraba la situación. Hable con una consejera en un centro primario de atención a la salud, que me asesoró de como utilizar las pastillas, me dió todo su apoyo y me recomendó abortar y hacer mi vida tranquila y sin problemas y no aceptar un embarazo no deseado. Espere la fecha pactada y llegada lo realicé en la tranquilidad de mi casa. Tuve escalofríos, vómitos, dolor punsante durante horas... fue bastante agónico, pero PASÓ. Al día siguiente ya me sentía bien, me dolía muy poco casi nada y hasta empesaba a sentirme cálida y en paz como antes, volví a ser yo, me sentía angustiada porque entendía la magnitud de lo que había hecho, pero el sentirme en paz nuevamente no tenía precio, no tenía comparación. El tiempo pasó y ahora ni siquiera me duele al recordarlo, porque la sensación de libertad, paz y tranquilidad repito, no se compara con nada. Si me siento mal al respecto, claro que si, pero que puedo hacer? juzgarme? porqué? si solo soy humana y tengo permitido cometer errores... y machacarme con lo sucedido o recrearme en el dolor para que? si ya pasó y en fin de cuentas volví a ser libre, que era lo importante porque si ese bebé hubiera nacido yo hoy estaría sin dormir, hecha una esclava atras del mismo tratando de satisfacer lo imposible... y todo por un error? no vale la pena tal sacrificio sin amor... porque algo es cierto a pesar de todo, no hay nada peor que traer un bebé al mundo sin ganas. Asi que chicas no se arrepientan, lo que pasó, pasó, olvídense. Piensen mejor en hacer algo por ustedes, en mejorar su vida, su cuerpo, en mejorar su felicidad, recuerden que ese embarazo no fue ni planeado ni deseado y alégrense de ya no estar bajo esas circunstancias tan nefastas de aceptar un hijo por obligación. Hoy por hoy me alegro de haber salido de eso. Y agradezco a la vida tener la oportunidad de elegir cuando tener hijos. De poder planificar tranquila con quien tenerlo, cuando y donde, y no de sopetón sobre la marcha porque sí nomás. Agradezcan tener una segunda oportunidad para hacerlo mejor la próxima.
Czy nielegalność twojej aborcji wpłynęła na twoje uczucia?
Si, sufrí muchos nervios, miedo y vergüenza, me sentí ultrajada moral,física y espiritualmente.
Jak inni ludzie zareagowali na twoją aborcję?
Cuando todos te presionan la mejor decisión es el aborto, para liberarte de la situación incómoda.