Mari
2020 Chile
Did the illegality of your abortion affect your feelings?
Quiero contar mi experiencia para muchas de las mujeres que seguramente le surgen muchas interrogantes y ninguna puede ser respondida por ningún medico cuando se vive en un país en el que no puedes decidir por ti misma. Todo comenzó cuando un día estaba haciendo ejercicios y mi mamá me dijo que soño que estaba embarazada y yo solo reí porque nunca pensé que ese sueño se iba hacer realidad. Los días pasaban y no me llegaba mi menstruación, comenzé asustarme, hasta que un día mi mamá me preguntó que por qué este mes no le pedí que me comprara toallas, y fue cuando decidí ir un día viernes a un laboratorio donde hacían el examen de sangre para detectar la hormona del embarazo, tuve que esperar hasta el otro día, fui a retirarlo y me di cuenta que tenía de 5 a 6 semanas de embarazo, estaba con mi pololo, solo llorabamos y le decía que no podía tenerlo que no quería ser mamá, hasta que me dijo que fuéramos a su casa y le insisti en no contarle a su mamá, pero le contó pensando en que ella podía ayudarnos, y que iba respetar mi decisión, pero no, cuando el le contó ella tenía una sonrisa en su cara y sus ojos brillaban como si fuera la mejor noticia del mundo, mas me daba cuenta de todo lo que estaba por venirse y no podía dejar de llorar, me deprimia aún más su reacción que es todo lo contrario a la de mi mamá, para mi mamá sería una desilusión, ella y mi papá nos ha sacado adelante a mí y mis hermanas, las dos son profesionales, solo quedaba yo que estaba cursando segundo año, y yo sabía que mis metas eran otras, no era tener un hijo y menos iba a tener un hijo por vivir en un país que no respeta las decisiones de cada persona. Ese día me enteré que le contaron al papá de mi pololo y que estaba emocionado con la noticia, por otro lado, en mi casa mi mamá constantemente me decía que le dijera si estaba embarazada, y me amenzaba con hacerme un test, lo cual lo hice, pero días antes había ido a casa de una amiga y le pedí que orinara en un recipiente porque sabía que ese momento llegaría. Pasaron los días y trate de contáctarme con organizaciones feministas, paginas, hasta que conseguí las pastillas a 65 k, tuve que hacer mi propio plan con horas, para que mi mamá no sospechara nada, ya que su atención estaba día y noche sobre mi, sentía mucha presión y no quería que nada saliera mal, tuve mucha ansiedad, y sentía muchas nauseas e intentaba no vomitar para no levantar más sospechas. Tuve que decirle a una amiga lo que pasaba, y pedirle si podía ayudarme, ella era estudiante de enfermería, pero constantemente intentaba hacerme cambiar de opinión cuando solo quería que alguien me dijera que todo iba a estar bien, solo eso, mis días eran de mucha ansiedad y leer testimonios en esta página me hacía sentir un poco mejor al poder saber lo que podía pasar en ese momento. Fui a casa de mi amiga y todo estaba calculado para llegar y comenzar con las segundas pastillas, pasaron dos horas y me cayó la primera gota de sangre, hasta que luego cada vez me dolía más mi utero, y sentía contracciones, mi guata se ponía dura, y pasaron 4 5 horas que debí estar en una misma posición sin bajar las piernas, y me dolía mucho la guata, tuve que pararme al baño ya no aguantaba, y me dio diarrea, en eso sentí que cayo algo, y me di cuenta que era un coágulo grande, supuse que era el embrión, después de eso no tuve tantos dolores, han pasado una semana y un día, y aveces me da dolor como los de menstruación, he tomado ruda, y ahora tengo miedo de ir al ginecólogo para verificar si sigo embarazada o si tengo restos, lo cual me da miedo que me sometan a un raspaje, esperaré una semana más para ir, para que se vacíe mi utero, y junto con eso debo contarle a los papas de mi pololo qué tuve un aborto espontaneo, de verdad es muy duro lo que he pasado, pero es lo mejor, y quizá es aún más fácil cuando nadie sabe, y nadie está presionandote, solo espero que pase todo y estar bien sin que mi familia se entere de esto, ya que mi mamá es una persona con pensamientos retrogados como casi toda persona de generaciones pasadas que no pueden lograr comprender. Solo espero que si lo hacen estén decididas, yo no me arrepiento, fue un alivio, pero a la vez todo se me puso difícil pero por otras personas, no por mi. Fuerza chicas, mucha fuerza!