Louula
2016 México
Esta es mi experiencia. Ocurrió el 1 de octubre del 2016. Llevaba 2 años de relación con mi pareja, nunca nos protegimos al tener relaciones sexuales y siempre confié en el método del “ritmo”, mi periodo menstrual todo el tiempo ha sido irregular y era más que evidente que nunca sabía cuando eran mis días más fértiles. Cuando mi regla se atrasaba demasiado, siempre me preocupaba y descartaba la posibilidad de embarazo con una prueba y listo, a seguir con la misma rutina (nada fiable) y pues sí, así pasó, en el mes de septiembre del 2016 no me vino mi periodo en los días estimados ya tenía un atraso como de una semana y sentía síntomas pre-menstruales como cólicos y pechos hinchados, nomás que esta vez sentía náuseas y mucho cansancio (factor importante que deje pasar y culpe al trabajo o mi mala alimentación). Mi pareja me decía que ya me iba a llegar mi periodo y pues que no creía que estuviese embarazada y yo tampoco lo creí. Un lunes 26 de septiembre saliendo del trabajo (ya tenia como 2 semanas de atraso) compré una prueba de embarazo de farmacia y fui a casa de mi pareja a hacerme el test, orino en el y mi pareja me lo pide para que no viera el resultado, no pasa ni 5 segundos y mi pareja me dice con una cara no se si de tristeza, felicidad y a la vez decepción: “¿Me creerías si te digo que salió positivo...?”. No lo podía creer, no quería creerlo. Me invadieron todo tipo sentimientos pero la mayoría negativos en ese momento y ese día, para confirmar salió a comprarme otras 2 pruebas de embarazo y me la hice la segunda y salió positiva, después de eso corrimos a un laboratorio para la confirmación, me sacan sangre, espero súper nerviosa y me dan los resultados y para mi mala suerte; sorpresa me sale un resultado positivo con una leyenda de: ”FELICIDADES” salí casi corriendo del laboratorio directo al auto, en ese transcurso casi me desmayo y empecé a vomitar de los nervios. Una vez arriba del auto me convertí en un mar de lagrimas, enojo, decepción, coraje e hice berrinche como niña chiquita, diciéndome a mi misma: “¿Qué voy a hacer? ¿Por qué a mi? Y unas cuantas obsenidades” mientras que mi pareja me miraba tratando de guardar compostura. Me calmé un poco y me dice: “Se qué no me vez sorprendido y esta de más que te diga esto, pero yo ya pasé por esto (una antigua ex pareja) y hasta me hizo feliz que saliera positivo.” Ya más tranquila, y dentro de mi desesperación pensando en que podía hacer le marqué a mi ginecóloga y para mi buena suerte estaba de vacaciones, además dudo mucho que me pudiese haber ayudado ese día porque en donde vivo el aborto es ilegal y súper penalizado. Llegamos a casa de mi pareja, le marqué a una amiga que también había tenido un aborto hace muchos años para saber dónde había conseguido las pastillas, me pasó una página, pero sinceramente no se si era de fiar y no hice ninguna compra. Me fui a mi casa, traté de esconderle a mi mamá que algo pasaba, solo llegue y me encerré en mi cuarto (por supuesto nunca le dije nada y hasta la fecha sigue sin saber, al igual mi papá). Ya en mi cuarto buscando la manera de cómo abortar, recordé que una amiga me apoyaría en este tipo de situaciones, me contacte con ella, le conté la situación estuvo en total acuerdo y dispuesta a ayudar, incluso me ayudó a conseguir las pastillas (cabe aclarar que las pastillas en donde vivo no las venden si no es con receta médica) por azares del destino y no se como, consiguió las pastillas con una compañera de ella, pero me las iba poder entregar hasta el viernes y así estuve toda la semana tratando de esconder a mi familia y a mis compañeros de trabajo que algo sucedía. Se llega el viernes y voy a casa de mi amiga por las pastillas, me explica lo que tengo que hacer, me envió guías, me compartió el número de celular de una compañera para que me asistiera en el aborto. Se llega el día sábado 1 de octubre 2016, les inventé la mentira a mis papás que iba a ir a la playa con mi grupo de amigos, aceptaron. Realmente, fui ese fin de semana a la casa de mi pareja a practicarme el aborto médico. La primer dosis fue a las 3:00 p.m. : 4 pastillas de Misoprostol bajo la lengua durante 30 minutos, sin tragar saliva hasta ya pasados los 30 minutos, yo las dejé más porque quería que realmente funcionara. A las 2 horas empiezan los dolores y el sangrado con coágulos. A las 8 horas tome la segunda dosis, de la misma manera 4 pastillas sublingual y 30 minutos. Mi pareja estuvo conmigo en todo momento, me ayudó a practicar unos ejercicios, me preparó té para calmar los dolores, la única ocasión que salió fue para traerme cena la cual terminé vomitando. En ese rato, lloramos, nos reímos, nos acurrucamos e incluso se despidió. Ya había tomado las 2 primeras dosis y mi aborto ya había empezado desde la primera dosis, tuve cólicos, diarrea, mucha sangre con coágulos y los dolores que sentí fueron soportables (cada cuerpo es distinto). Se dan las 3:00 a.m. y es hora de la tercera y última dosis y se repite el procedimiento, para la tercera dosis de pastillas ya no me sentía embarazada, el peso que sentía había desaparecido, me sentía ligera... Sinceramente, nunca vi ningún saquito que saliera en el sangrado (mi novio y yo buscamos bien o simplemente no nos dimos cuenta), además de que debí tener a lo mucho 3 o 4 semanas de embarazo y el tamaño es CASI microscópico. A pesar de todo mi aborto fue exitoso, a la semana o a las 2 semanas de haberme practicado el aborto me hice una ecografia y todo salió limpio. Aun sigo con mi pareja, es un tema del que no hablamos porque fue algo que ya pasó y fue una decisión de los dos. Sinceramente, tuve mucha suerte ya que las cosas se fueron dando de tal manera para que saliera perfecto y bien. Se que no todo el tiempo es así y no todas corren con la misma suerte, mi conejo es: Si se enteran de que estás embarazada cuéntenselo a quien le tengan más confianza y que estén seguros de que los va a ayudar y no a juzgar. Si tuviese que volver a prácticarme un aborto, lo haría y sinceramente no me arrepiento. Sé que es una decisión difícil y que cuesta vivir con eso, pero creo que hay veces en las que se tiene que ser egoísta y pensar en una misma de lo que se quiere hacer y de lo que no. P.S. Un abrazo muy fuerte y muchas fuerzas a todas aquellas mujeres que se han practicado un aborto o están apunto de realizar uno. Se tiene que tener una súper fuerza para tomar ese tipo de decisiones y recuerda, no estás sola y no eres la única.
Padres machistas.
A ilegalidade de seu aborto afetou seus sentimentos?
En ciertos aspectos.
Julieta Iovaldi Curutchet
Decidí desde el principio no compartir esa experiencia con la pareja de ese…