Anónima.
2017 Chili
Fuerte, empoderada, libre, contenta, segura, tranquila.
Mi experiencia fue sorprendentemente buena: las pastillas me llegaron a tiempo, sin problema; tuve la suerte de estar acompañada durante todo el proceso por compañeras y amigas feministas, y por mi compañero, quienes estuvieron conmigo siempre; no tuve complicación alguna al momento de tomar las pastillas ni después (porque, además, la información entregada por women on web era muy clara); tuve dolor por un periodo corto (1 hora y media) y luego me sentí muy bien; luego de abortar no tuve complicación alguna; y finalmente el proceso sirvió como un proceso de reafirmación, empoderamiento y liberación. El dolor fue solo un poco más intenso que una regla dolorosa. Espero que muchas mujeres mas tengan esta posibilidad, la de vivir una buena experiencia luego de optar por ser libres y decidir sobre ellas mismas, por ellas mismas.
Simplemente no era el momento en el que quería tener un/a hijo/a. Cuando quiera ser madre, será mi decisión, porque es mi cuerpo y mi vida.
L'illégalité de votre avortement a-t-elle affecté vos sentiments ?
El aborto en Chile es legal sólo en tres caudales (inviabilidad del feto, peligro de vida de la madre y violación) y la ley que lo despenalizó en estas situaciones fue aprobadas recién este año (2017). En todos los demás casos, en las miles de razones que podemos tener las mujeres para no ser madres en determinado momento, o nunca en la vida, el aborto es ilegal. Esto impide que las mujeres decidan sobre sus cuerpos y sus vidas de forma libre y autónoma, dejándolas en una posición de completa vulnerabilidad ante una violencia machista estructural. Es urgente que esta situación se revierta, pues es la única forma en que las mujeres podemos comenzar a recuperar la dignidad que nos quita el capitalismo patriarcal. Para ello, la organización feminista es crucial. Por el momento, lo que hacen organizaciones como women on web es la única opción para que mujeres como yo podamos ejercer nuestra libertad (aunque de forma limitada). Esta situación es tan violenta para nosotras, que fue probablemente lo que mas me costo del proceso, el sentir que la sociedad me juzga por querer ser autónoma y libre. Ahora, luego del aborto, esto no es un problema pues me siento más libre y plena que nunca, sin tener duda alguna de la decisión que tome.
Comment les autres personnes ont-elles réagi à votre avortement ?
Yo aborte porque puedo decidir sobre mi cuerpo y mi vida; porque soy libre y autónoma para elegir cuándo y cómo ser madre, o no serlo nunca; porque no estoy dispuesta a seguir aguantando la violencia de un sistema que se apropia de nuestro cuerpo y de nuestro trabajo, y que nos asigna un rol dentro de su movimiento, como si eso fuese natural e incuestionable. Yo decido qué quiero ser, cuándo lo quiero ser y cómo llegaré a serlo. Yo decido el curso que tome mi vida, y la posibilidad de hacer efectiva esa convicción es una hermosa forma de culminar un proceso de reafirmación, empoderamiento y liberación. Debemos luchar juntas para que esta opción sea de todas.