Ana
Mis decisiones son las mejores porque son mías.
2008 México
Temía reacciones físicas muy fuertes y afortunadamente sólo fueron muy pocos los síntomas. Algo dolorosos, con un poco de escalofríos y cólicos fuertes por un par de horas, pero depués disminuyeron. Fue un alivio tener personas con quienes apoyarse. En realidad la experiencia no es más grande que una regla abundante y más dolorosa. Nada que ver con los videos y las imágenes que quienes están en contra siempre difunden. El aborto con medicamento, a un tiempo reglamentario y en concordancia con la bioética no tendría que resultar dramático ni traumático, esas características oscuras sólo las fomentan quienes lo impiden y obstaculizan que las mujeres podamos decidir sobre nuestro cuerpo.
No quería ser madre. No me lo planteaba como una posibilidad todavía, no estaba segura ni de eso ni de la pareja con la que estaba, así que tomé la mejor decisión para mí.
¿La ilegalidad del aborto afectó sus sentimientos?
Por supuesto, pensar y temer los riesgos y las consecuencias legales hubieran hecho más complicado todo el proceso. Aún cuando en mi país es legal en el centro, y aún con que la mayor parte de la atención fue muy buena, no faltaron signos de molestia o prejuicios en algún personal sanitario. Afortunadamente no tengo ideas religiosas o sociales estrictas ni tradicionales que limiten o debiliten (demasiado) mi actuar, pero pienso en las compañeras que sí, para las que es una decisión tremendamente difícil y me da pena pensarlas con tantas cosas en su cabeza y encima de todo, si lo hacen en un estado o ciudad donde no es legal, todavía sintiéndose criminales. Es prioritario que se legalice en la mayor parte de mi país México, el aborto, pues las mujeres no debemos pasar por esta experiencia con "culpas, reproches, prejuicios y estigmas" producto de la desinformación y la ignorancia.
¿Cómo reaccionaron otras personas a tu aborto?
En México, en el centro del país, el aborto es legal desde el año 2007. Afortunadamente tuve la necesidad de usar el serviicio cuando éste era legal, si no, no sé qué de terror habría sentido, pero igual lo habría hecho, de eso estoy segura. No quería ser madre, ni me planetaba la idea de serlo seriamente, la persona con la que estaba no era una pareja cn la que considerara esa posibilidad y tenía numerosos planes en puerta. En ese entonces no me cuidé y ahora sé por qué. La primera idea que vino a mi cabeza fue porque era una irresponsable pero con el tiempo he pensado que detrás de esa irresponsabilidad había muchas más cosas importantes. Mi situación de vida no era la mejor, llevaba años tratando de recuperar el ritmo de mi vida y no encontraba cómo. Tenía 24 años y años antes mi madre había muerto después de una larga enfermedad. Yo pensaba que lo sobrellevaba de la mejor manera, pero ahora veo que estaba sumamente deprimida y no me daba cuenta. Estaba muy sola y después de su muerte no tuve otra figura parecida en la cual apoyarme, llegaron cosas importantes, la salida de la universidad, el ingreso al mundo laboral, convertirme en una adulta completamente y ninguna de esas cosas me salió bien por más que intenté. Todo esto que escribo lo hago a la luz de los años, ya con la perspectiva del tiempo. En ese entonces no m e daba cuenta de nada, si me hubieran preguntado yo hubiera dicho que lo estaba haciendo bien, que todo estaba bien, pero no era así. Me relacioné con mi pareja de entonces como buscando refugio y con todas mis carencias, mis dudas, mis vacíos y tristezas como equipaje. El resultado era desastrozo, a pesar de caer en violencia y múltiples problemas me costaba mucho dejar de estar con él, renunciar a la relación. Después de un proceso terapéutico y de conocer el enfoque de género y el feminismo, hoy me doy cuenta que mi necesidad y urgencia de estar con él aunque no era lo mejor, de no cuidarme a la hora de tener relaciones sexuales, entre otras cosas, obedecían a la enorme depresión y soledad que tenía. Si hubiera tenido un padre, un hermano, personas del núcleo familiar con las cuales llorar y reflexionar mi pérdida y mi confusión estoy segura que otra cosa habría pasado. Con esto, no intento hacer una ecuación simplona como: muerte, más soledad, igual a embarazo....no. Es más complejo que eso, pero este no es el espacio dónde anotar tooooodos los factores, sin embargo sí son parte de los más importantes, de los fundamentales que entre muchas otras cosas no me dejaron ver que no estaba decidiendo muy bien las cosas. Con esto trato de explicar que ese embarazo fue producto de un proceso muy muy complejo que sólo yo y ahora veo, un poco más claro. Afortunadamente, soy una mujer liberal que aunque no sabía entonces de la perspectiva de género y los derechos que tenemos las mujeres, sí sabía que tenía que hacer lo que yo creyera corecto sin atender a otras opiniones. Me pienso afortunada por no tener culpas, por no tener ideas equivocadas que hubieran echado a perder mi decisión. El aborto, es un derecho, es un opción que las mujeres debemos tener porque el sexo a veces, puede cubrir muchas otras cosas que debajo de nuestra piel, en nuestra alma o corazón, no estan haciendo mal. A veces, la única manera que tenemos algunas personas de estar cerquita de alguien más es a través de él y para quienes no han estado así de solos es dificil aceptar eso. Por eso es tan importante que el aborto sea legal en todo el país, en toda la región de américa latina. Porque todas las mujeres somos diferentes y tenemos distintas razones para no querer pasar por un embarazo y crianza. Me siento afotunada, y agradecida. Con todas las personas que han luchado en mi país porque el aborto sea legal y seguro, con todas las personas que comprenden a las mujeres y su situación de permanente desventaja, por las personas que comprenden a otras personas...eso falta en este mundo.